Guia práctica de employer branding para convertirse en una marca empleadora

El employer branding es un concepto en evolución basado en algunos fundamentos como la consideración protagonista del candidate experience. Reforzar la marca empleadora es clave para posicionarse y atraer y retener el talento. Tender hacia la mejora continua de la cultura organizacional pasa por abrir canales de comunicación, ofrecer buenas condiciones y medir todos los datos. Los liderazgos juegan un papel crucial en la gestión de personas.

Sin embargo, retener esos valiosos recursos es lo realmente difícil. Con frecuencia, los empleados se sienten desmotivados y se crea un ambiente laboral que frena el desarrollo de la compañía. ¿Qué está ocurriendo?

 

Fundamentos del employer branding

Cada día es un mayor desafío para las empresas contar con una plantilla cualificada y estable. El alto índice de rotación, especialmente en sectores como la hostelería, suponen un gran coste para las organizaciones. Apostar por un cambio en la cultura corporativa que se oriente hacia la construcción del employer branding o marca empleadora no es una cuestión de un día. Se trata de modificar la estrategia hacia un mejora continua trabajando la reputación y el posicionamiento de manera constante.

El employer branding es la imagen que tienen de ti tanto los trabajadores actuales como los futuros, es decir, las posibles candidaturas. Tiene un importante componente emocional, pues se mueve en el terreno de las expectativas y las percepciones. Entre los aspectos más valorados por la generación actual destacan los siguientes:

  • Beneficios sociales: seguro médico, tickets de comida y otras retribuciones en especie.
  • Flexibilidad y adecuación del espacio de trabajo: para trabajar en remoto cuando no sea necesario estar presencialmente facilitando la conciliación.
  • Derecho a la desconexión y respeto de horarios y vacaciones: si algo ha traído la pandemia es la reestructuración de la jerarquía de prioridades en el plano existencial, volviendo a otorgar al descanso, autocuidado y tiempo personal las primeras posiciones.

En relación con el employer branding se habla del círculo virtuoso porque es difícil decidir dónde empieza. La clave es ponerse en movimiento, de lo interno a lo externo y/o viceversa.


Pasos para trascender la atracción y retención del talento

La mayoría de las empresas ya son conscientes de que un alto índice de rotación puede acabar con ellas. Ya no se trata solo de atraer y retener el talento, aunque este sea un aspecto central del employer branding sino también de cuidar la fuerza laboral para mantener a la plantilla motivada, comprometida y cohesionada. Estas son algunas de las razones por las que debes mejorar la marca empleadora:

  • Un buen clima laboral con trabajadores felices es sinónimo de aumento de la productividad.
  • Refuerza el compromiso con la compañía y sus objetivos estratégicos.
  • Adquieres una ventaja competitiva con respecto a otras compañías del sector.
  • Mejoras tu capacidad de negociación con las candidaturas que ya vienen interesadas en formar parte de la cultura organizacional independientemente del rango salarial.

Ahondando en la atracción del talento

Todo esto está genial, pero ¿cómo hacer que los trabajadores mejor cualificados decidan trabajar contigo y no con la competencia? Son muchas las acciones que puedes desarrollar pero es recomendable seguir estos pasos:

  • Diagnóstico: analiza el estado de la cuestión en tu organización abriendo canales de comunicación para que todos los niveles puedan expresar su percepción tanto de la marca como de las relaciones laborales entre compañeros.
  • Define objetivos en función de estos resultados: te interesa más en este momento atraer una gran cantidad de solicitudes de empleo, retener el talento, mejorar el clima laboral o desarrollar proyectos por equipos a medio o largo plazo.
  • Elabora tu propuesta de valor: desarrolla qué convierte a tu marca en diferente y atractiva. Pueden ser las condiciones laborales como el horario o el salario pero también la propuesta de actividades de afterwork o las posibilidades de promoción interna.
  • Cuida la redacción de las ofertas laborales, generando confianza y cercanía. También es importante definir a qué público te diriges con tu contenido, no solo las vacantes. Es imprescindible que transmitas coherencia entre la imagen hacia fuera y hacia dentro. Si hay fricción entre ambos aspectos, el impacto negativo en el employer branding será detectado y mantenido en el tiempo.
  • Apuesta por la formación de un equipo diverso, inclusivo y que promocione la igualdad.
  • Crea e innova desde el mismo storytelling. Cuenta tu historia sobre todo con testimonios reales que no obvien los últimos acontecimientos sino que incorporen cómo los trabajadores han transitado por la crisis sanitaria. Y cómo el apoyo de la empresa ha sido fundamental para consolidar los puestos y mejorar el desempeño.
  • Mide los resultados: aprovecha las soluciones informáticas para gestionar el people analytics. Gracias al manejo del big data podrás afinar en las decisiones y en las actuaciones que te interesen de cara a la mejora continua de la marca.

Apuesta por el cambio en la cultura organizacional

El employer branding recorre todo el viaje del empleado, no solo en el momento del candidate experience sino también mientras trabaja e incluso si es despedido o renuncia al puesto. Todos son prescriptores de marca. Además lo que ocurra en una salida de un trabajador afecta a las personas que se quedan dentro de la compañía.

Toda organización tiene que tener trabajados los valores y la cultura corporativa. Pero ¿quién gestiona el employer branding de una empresa? Lo ideal es colaborar entre el departamento de marketing y el de recursos humanos. Recientemente ha surgido un nuevo rol, el employer branding manager que intermedia y unifica ambas áreas.

Entre sus funciones cabría la de vigilar que no se cometa uno de los errores habituales que van en contra de mejorar la marca empleadora: el secreto. Para retener el talento es necesario que fluya la comunicación. Las barreras internas favorecen los rumores, la desconfianza y la fuga de cerebros. El primer paso para construir la employer branding que necesitas es fomentar la comunicación directa, transparente y en tiempo real.

En este sentido, esos canales tienen que ser bidireccionales. Escucha de manera activa las propuestas del personal y aprovecha su experiencia. Por último, no descuides la formación. Hoy día la capacitación con sus actualizaciones son de las características empresariales más valoradas acordes con un entorno volátil y cambiante.