PREPARA TU BÚSQUEDA DE EMPLEO EN VERANO PARA TRIUNFAR EN SEPTIEMBRE
El periodo estival es un momento en el año muy propicio para hacer balance. La actividad en las empresas baja pero este tiempo también tiene algo de efervescente. Hay ganas de vacaciones y, a la vez, de pensar sobre el futuro con motivaciones renovadas de cara a septiembre. Preparar el CV con el objetivo de afrontar nuevos retos profesionales puede ser una tarea ilusionante: proyectarse, después de tanto tiempo de incertidumbre.
Chequea tu CV y analiza si habla realmente de ti, de quién eres profesionalmente. Pregúntate qué harías si estuviera en tu mano contratar a una persona como tú. Actualiza, rediseña, resalta y prepara tu candidatura para abordar retos profesionales en otoño.

Aspectos generales de un CV ejecutivo
En un currículum ejecutivo es fundamental centrarse en los logros obtenidos. Aportando información relevante que pueda ilustrar tanto tu forma de trabajar y competencias como los rasgos de tu personalidad como líder. No debe faltar un poco de épica y la determinación por alcanzar nuevas metas. Aunque sin olvidar mencionar que los logros se deben también al trabajo en colaboración. Tus habilidades como líder quedan de relieve, pero no se escatima reconocimiento al trabajo de los demás.
A la vez, es interesante generar la confianza sobre tu proceder a través de la aportación de datos y conocimiento sobre el sector. En este sentido, evita utilizar un lenguaje demasiado experto porque no siempre te leerá alguien que conoce las funciones de tu posición. La información específica ayuda a que la imagen que se crea en la mente la persona que lo lee es real, concreta. Que te vea como parte de la organización. De ahí la importancia de tener varias versiones y adaptar según tus competencias la hoja laboral a las necesidades de talento de la empresa a la que te presentas.
La extensión de un CV para posiciones ejecutivas o directivas no es necesario que se reduzca a una página. Pero tampoco debe exceder de dos o tres. Es fundamental señalar los hitos más importantes de la vida laboral. Un currículum de este tipo suele contar con un gran volumen de experiencia. Como siempre, evita aquella que no esté relacionada con la posición a la que postulas.
La fotografía en un currículum puede influir bastante. Ilústralo con una buena imagen de ti donde la iluminación y la vestimenta sea adecuada y en consonancia con la cultura de la empresa. Una instantánea donde no haya sombras y se resalten lo aspectos positivos de tu personalidad (risueño, fiable, decidido, implicado). Es preferible que sea una foto de estudio para que puedan entresacarse estas cualidades.
Utiliza un diseño de plantilla donde aparezca la información bien ordenada. Depende un poco de cada cual, pero un punto original, salirse de la clásica plantilla y apostar por un diseño personalizado puede ser un riesgo asumible que genere valor. Eso sí, siempre ha de tener un aspecto limpio y estructurado. Huye del abigarramiento, procura que luzca con suficiente espacio para que la lectura tanto en papel como en pantalla sea cómoda. Resalta en negritas los aspectos donde quieres que la mirada se detenga.
La estructura de un CV para un perfil profesional cualificado
Un currículum executive debe comenzar con un resumen atractivo donde quede reflejada la personalidad como responsable, como guía. Dependiendo de si tu perfil tiene que ver más con operaciones, comunicación o ventas, destaca aspectos donde eres realmente competente.
Redactar unas líneas genéricas con lugares comunes que todo el mundo incluirá no es interesante para un perfil de liderazgo. Enriquece tu bio/resumen con tres puntos fundamentales como experto en tu actividad. Dedícale cuatro o cinco líneas y redacta correctamente utilizando palabras que sugieran acción, proactividad, motivación, aspiración e implicación en tus propósitos, siempre alineados con la estrategia de la compañía.
La parte de experiencia es donde radica el interés específico del CV. Donde realmente se van a valorar las competencias y se vislumbrará el potencial que tienes para formar parte en el avance y desarrollo de la misión, en el destino de la empresa.
Es interesante destacar las funciones que has desempeñado relacionadas con perfiles de tu posición y los negocios donde has tenido oportunidad de implementarlas. Añade los años que darán cuenta de los tiempos y la determinación para conseguir objetivos. Operaciones financieras o comerciales destacadas, responsabilidad en campañas publicitarias exitosas, desarrollo de nuevas líneas de negocio o implementación de otras áreas en la compañía. Muestra en pocas palabras tus capacidades de liderazgo.
Como también lo es describir esquemáticamente las tareas, cuáles eran tus cometidos y responsabilidades, haciendo hincapié en aspectos clave de la posición. Aporta datos, porcentajes, volumen de clientes, de facturación, inversión, número de empleados que ayuden a forjarse la idea sobre el grado de participación en la buena marcha de tu paso por las diferentes empresas. Sin saturar, en la entrevista habrá tiempo para ampliar datos si se requieren.
Habilidades destacadas en un apartado diferente
Otra recomendación es diferenciar, enumerando en el apartado correspondiente y detallándolas, las habilidades y competencias que has desarrollado gracias a tus responsabilidades. Hazlo de forma escueta, en una línea. Cuestiones como capacitación de personal, mejora y rediseño de procesos en operaciones, desarrollo e implantación de nuevas áreas de negocio, mejora de la relación con proveedores, gestión del flujo de trabajo… Incluye también algunas de tus fortalezas.
La formación y educación tiene interés si es muy especializada o se ha cursado en un centro de prestigio. Aporta la información sobre títulos de experto, máster y certificaciones. La educación en el extranjero tiene el doble valor del conocimiento y aprenderlo en un idioma distinto al nativo.
Los idiomas son fundamentales en un CV de perfil alto. El inglés fluido es casi una habilidad imprescindible pero el manejo de otras lenguas como francés, alemán o chino mandarín aportan un valor importante a la candidatura. Muy necesario para responsabilidades de compras.
Incluye premios y reconocimientos a tu trabajo que sean notorios y tengan trascendencia en el sector. Incorpora un apartado para publicaciones, tanto en formato libro como enlaces si crees que resultan de interés para quien leerá el CV. Puedes añadir un apartado de varios con enlaces a vídeos si has participado en actos, mesas o charlas como profesional.
¿Qué tipo de currículum se adapta mejor a un perfil de alta cualificación?
La distribución de la información o el tipo de currículum puede hacerse de diferentes formas. Depende de lo que necesites resaltar. Si se hace por empresas, es necesario describir qué tareas desempeñaste, logros conseguidos, habilidades y competencias técnicas obtenidas. Esta sería equiparable a un CV cronológico.
Pero también puedes enfocarlo orientado a las distintas funciones que has cumplido si te interesa remarcar un perfil muy especializado con una intensa experiencia o, por el contrario, uno muy versátil y polivalente.
Potenciar el alcance de un currículum en redes sociales
Una vez elaborado el currículum, comienza la fase de difusión. Se trata de generar el interés suficiente sobre tu trayectoria creando otros contenidos que refuercen la imagen de marca personal y marca digital. Esto puede realizarse en un blog personal o de manera más sencilla mediante post en tus redes sociales. La participación en los debates especializados, por ejemplo en LinkedIn, añade valor a tu marca y aumenta la reputación y la visibilidad de tu perfil.
Es importante que en redes sociales aparezcas siempre con un perfil profesional. No sabes si puede jugar en tu contra, aunque pienses que no tienes nada que esconder.